En los edificios residenciales se emplea cada vez más frecuentemente no solo agua potable, sino también agua pluvial. Esto ahorra dinero y protege el medio ambiente. El agua pluvial puede emplearse p. ej. para:
lavar la ropa,
regar el jardín,
regar las flores,
lavar el coche, o bien
la cisterna del inodoro.
Con ayuda de una instalación adecuada, el agua pluvial se puede recoger y utilizar en vez del agua potable.
Descripción de la instalación
El agua pluvial se recoge en un depósito colector. Desde el depósito, el agua es bombeada a una red de tuberías prevista para ello. De esta red puede tomarse entonces el agua pluvial de la forma acostumbrada con el agua potable. Si el depósito está vacío, puede llenarse con agua potable para mantener la instalación en funcionamiento. El agua pluvial puede incluir agua para diferentes usos: lavar, bañarse, cocinar, regar plantas, etc.
El objetivo de esta tarea es crear un circuito de control que satisfaga los requisitos de una instalación de este tipo.
El esquema siguiente muestra cómo funciona una instalación para el aprovechamiento de agua pluvial:
Requisitos del sistema de control
El agua pluvial debe estar disponible en todo momento. En caso de emergencia, el sistema de control debe conmutar automáticamente a agua potable, p. ej. si no hay suficiente agua pluvial.
Al conmutar a agua potable no debe penetrar agua pluvial en la red de agua potable.
Si no hay suficiente agua en el depósito de agua pluvial, la bomba no se debe poder conectar (protección contra marcha en seco).